Los Mossos d’Esquadra han puesto en marcha un Plan de Acción contra las violencias sexuales en entornos de ocio con el objetivo de dar una respuesta policial eficaz frente a este fenómeno, garantizar la seguridad en entornos de riesgo y reducir las victimizaciones en este ámbito.
El plan se establece sobre cinco ejes estratégicos:
- La prevención
- El atestado policial
- La atención y seguimiento a las víctimas
- La investigación
- La formación de los agentes implicados
La atención a la víctima es el elemento clave de la acción policial tanto en lo que se refiere a la investigación del hecho como en su protección y atención.
Uno de los puntos que prevé el plan es el de garantizar la seguridad de los itinerarios desde las zonas de ocio al transporte público y en el cierre y salida de los locales con el doble objetivo de proteger a personas vulnerables e identificar posibles agresores sexuales.
También se potenciarán las rutas seguras con el posicionamiento de forma estratégica de dotaciones policiales en las salidas de ocio o en el recorrido hacia las zonas de estacionamiento y se mantendrán y mejorarán los patrullajes preventivos en vehículo ya pie o en puntos estáticos en las zonas de mayor incidencia delictiva. Si se detecta a una persona en situación de vulnerabilidad se ofrecerá seguridad en su trayecto ya sea a través de personas de confianza de su entorno, llamando a alguna persona familiar, preguntándole si se encuentra bien y/o si necesita ayuda.
Las acciones de prevención se completarán con controles en los accesos y salidas de las zonas de ocio para la detección y neutralización de personas potencialmente autoras de estos ilícitos y/o la intervención de sustancias destinadas a cometerlos. Se prevé también la instalación de Oficinas de Atención al Ciudadano (OAC) no permanentes (módulo) o (furgoneta) en puntos estratégicos.
La coordinación e intercambio de información con los puntos de información y atención en el ámbito de las violencias sexuales y con los cuerpos de Policía Local de Cataluña, vigilantes municipales o la Policía Portuaria, así como potenciar las inspecciones administrativas en locales formarán parte también de las acciones que se impulsarán y mejorarán.
El plan hace referencia también a la modalidad delictiva consistente en los abusos sexuales por sumisión química y vulnerabilidad química. En estos últimos casos, los investigadores se encuentran con la dificultad de encontrar restos de la sustancia en sangre y/u orina de la víctima a menudo porque la denuncia se ha realizado horas más tarde y la posibilidad de localizar restos es ínfima.
Sobre esta materia, los datos que existen policialmente están basados en la denuncia y el relato de la víctima. Durante 2021 y hasta el 12 de junio de 2022 se han recogido 288 casos relacionados de forma directa con la sumisión química (167) y la vulnerabilidad química (121).
Además de la formación a los Mossos d’Esquadra, uno de los ejes que se trabajará con las entidades y actores sociales también incluirá el refuerzo de la formación a profesionales y personas que prestan sus servicios en los ámbitos objeto del plan: trabajadores en espacios de ocio: camareros, personal de seguridad privada, controladores accesos, auxiliares de servicios así como trabajadores de los medios de transporte.